Así es! Ya arrancó el ya tradicional maratón Lupe Reyes que es ese esperado evento anual con el que nos certificamos en levantamiento de tarro y en toda clase de técnicas para intimidar a una piñata.

Todo a pesar de que diciembre representa un bombardeo ridículo de mercadotecnia navideña y un trafiquísimo del demonio que hay a todas horas y en todos lados. Por otro lado tiene su lado bonito: las posadas.

Sin embargo, algo que se me hace muy curioso es como gente que tienes rato sin ver súbitamente tiene el tiempo y la disposición de reunirse contigo para estas fechas... algo así como 'aprovecha la promoción'. Y por ello de 12 meses que tiene el año, tienes uno con la agenda completamente saturada y como los fines de semana son los primeros que te apañan, terminas en reuniones entre semana y en un estado etílico constante. Hoy llegué medio cruda a la chamba, cuando yo ya había prometido no volverlo a hacer... oops!

Y a eso es a lo que llamamos el legendario y ya aclamado maratón Lupe Reyes!